(Tejiendo las migajas del poder)
Recientemente el gobernador de Sinaloa, Mario López Valdez
reunió a lo poquito que queda de la élite del PRD. Al encuentro con el
mandatario acudieron un grupo muy selecto de connotados perredistas entre estos
José Luis López Duarte, Isaías Leal, Manuel Luque Rojas, Claudia Morales e
Ildefonso Medina, así como Juan Guerra Ochoa y Audómar Ahumada Quintero.
Todos de alguna forma tiene nexos con el poder del
empresario ferretero y quien no es funcionario, por lo menos lo acercan a
intereses den tan fino grupo selecto.
No es casual el encuentro y alguien de los presentes decidió
que esa fuera la lista de invitados, pues aunque no son muchos aceptamos que
faltaron otros tantos, por decir lo menos.
Creo que más que ayudar al PRD esa reunión lo que hizo fue
evidenciar, mucho más, lo que todos sabemos, la existencia de un partido que
testimonia su gran debilidad, el peor de sus pecados, la complicidad con el
poder.
La maniobra que realiza Malova es meramente artesanal,
recoge las chiras que le quedan y comienza a remendar. No teje finito, al
contrario, los trazos con que junta los pedazos son torpes, burdos remedos de
lo mismo de siempre.
El PRD se deja querer, se engolosina y acude glamoroso con
sus más finos comensales y agasaja al postinero, legitima su pedazo de poder.
En el reciente comunicado de prensa que emite el PAN firmado
por Burgos Marentes anticipa que sostendrán reunión de trabajo con el titular
del poder ejecutivo para consensuar una agenda en común.
Edagardo Burgos regresa con la mano estirada y pidiendo de
nuevo posada, arguye en favor de su ridículo regreso "que sólo busca un
acercamiento después de la ruptura" y ensaliva retóricamente su torpeza
afirmando que " la reconciliación se aplica sólo para situaciones
personales y las diferencias fueron institucionales" (¿?). Un merolico de
bisutería.
Se nota que el chamaco aprendió muy luego a mentir y trata
de engañarnos cuando dice que el regreso "es para abonarle a la
reconstrucción de Sinaloa". En verdad que sería de nuestra entidad y de
todos nosotros sin el párvulo dirigente, ahora resulta que el panista se mira
como un reconstructor y dirá bien, pues gran culpa de este desastre de gobierno
se le debe a la complicidad político electoral de ellos en el 2010 con el hijo
putativo de Juan Millán.
El PAN pule su estilo, enseña una mejor clase servil, adornan
la estirada y anticipan la remendada. En cambio en el PRD esconden la mano
izquierda y cobran muy bien con la derecha pero también se dejan querer, ambos
se acurrucan y abrazan sus pedazos de poder.
El gran tejedor ya tiene las dos chiras en las manos, los
volverá a juntar pues es muy claro que el PAN quiere que y sabe que en los
últimos tres años que le quedan a Malova es mejor llegar juntos con la gestión
del gobernador y desde adentro maniobrar hacia el 2016. En cambio el PRD sabe
muy bien que es casi nada en el 2016, es más no se imaginan compitiendo solos
en la justa electoral de la gubernatura, como oferta política sirven para
maldita sea la cosa.
Sin duda que parte de este "digno regreso" al
reparto del poder se lo deberá Malova al alcalde electo Armando Leysón quien
acomodó en los puestos de confianza del ayuntamiento que iniciará a partir del
1 de enero en Guasave a una mayoría panista.
Pero Burgos Marentes se hace el digno y dice que "no se
echa para atrás de los señalamientos que le hizo al gobernador el pasado 7 de
julio", puras valentonadas, la soberbia humillada pero mordiendo el hueso.
Edgardo lo sabe bien y debiera, por vergüenza, ya no
mencionar aquella “ofensa”, el exabrupto que lanzó en contra de López Valdez
por el caso Ahome, caramba, quién se acuerda de eso. Como dice Joaquín Sabina,
el chico “siempre tuvo la frente muy alta, la lengua muy larga y la falda muy
corta”.
Mientras en el PRD y el PAN sus aristocráticas dirigencias
ya encontraron la línea del “rumbo firme”, otro partido consolida su posición
política en las preferencias ciudadanas. El PAS es ahora la segunda alternativa
que incidirá en las políticas públicas de gobierno. La reciente intervención en
tribuna de Héctor Melesio Cuén al dar a conocer los resultados de la consulta
ciudadana que se aplicó a más de 27 mil sinaloenses sobre la reforma energética,
lo pone en el escenario de una forma distinta de incidir sobre la
gobernabilidad.
Es decir, mientras el PRD pasa anodinamente por el congreso
(esa será su historia), el PAS les pone el ejemplo de cómo se trabaja
políticamente desde la oposición. Ramón Lucas no es de grandes luces, es
producto incidental de una corriente política que lo infiltró en la comodidad
de un hueso y ahí va a seguir sin mayores comentarios.
Malova hace lo propio, acaricia a sus miserables huérfanos,
los zurce como buenos remiendos. No vaya a ser que la línea dura termine por
imponerse en el 2016 en el PRI, como así parece ser y es mejor contar con la
solidaridad política de un buen retiro, el menos eso (H.F) ©
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